Nórdica Blanca

¿Alguna vez te has parado a pensar en lo agotador que es escoger la funda nórdica perfecta que encaje con todo? Cuando buscamos fundas nórdicas para nuestros edredones nórdicos a veces nos vemos desbordados por la cantidad de modelos y colores que hay en el mercado. Una funda nórdica blanca siempre es un acierto; le vamos a sacar mucho partido y no nos va a cansar nunca, es tan versátil que puede encajar en cualquier estilo decorativo.

Con este tipo de fundas no hay límite en la creatividad, ya que podrás combinarla con todo tipo de estilos en tu hogar.

En un ambiente clásico una funda nórdica blanca aportará luminosidad. En este tipo de decoración o bien se tiende a utilizar mobiliario de maderas oscuras o a recargar un poco el ambiente, por lo que una funda lisa de color blanco aligerará el conjunto.

También puedes tener una habitación colorida y darle ese toque elegante con la funda nórdica blanca, que estamos seguros se verá perfecto.

La sencillez de las fundas nórdicas blancas no tiene que despistarnos; combinan perfectamente en ambientes sencillos tanto como en ambientes sofisticados y llenos de matices y ricos tejidos.

¡NO REQUIERE GRANDES CUIDADOS!

Es importante que si quieres mantener el color de blanco reluciente laves de forma regular tu funda nórdica. El lavado no ha de realizarse a temperaturas altísimas, eso debilita los tejidos. Lo mismo ocurre con la secadora; un secado excesivo debilita el tejido y además hace que aparezcan muchas arrugas y que la funda quede áspera al tacto.

Y aunque sea blanca, hay que evitar el uso de lejía en la medida de lo posible. En ocasiones no hay otro remedio para eliminar las manchas, pero su uso continuado puede hacer que tu funda nórdica blanca amarillee y se vaya haciendo menos resistente con el tiempo.  

¡Descubre en Ambients las fundas nórdicas blancas que se robaran tu corazón!